En la última década, la producción citrícola en los departamentos del norte y centro de Corrientes fue mutando, aumentando la superficie cultivada y orientando el desarrollo de las plantaciones de variedades en función de la demanda del mercado.
El Ministerio de Producción oficializó durante la Jornada Técnica de Campo realizada el jueves 15 de noviembre último, en el marco de la XVI Fiesta Nacional de la Naranja en Bella Vista, los datos del relevamiento citrícola de ese departamento, efectuados desde el año pasado.
Ante una se importante concurrencia de técnicos, productores y estudiantes afines se presentaron los datos del trabajo realizado a través de la Dirección de Producción Vegetal, la Dirección de Citricultura y el área de Cartografía con colaboración del INTA, la Asociación de Citricultores de Bella Vista, el Municipio de Tres de Abril y de Bella Vista.
En el año 2017, el Ministerio dispuso los recursos necesarios para poder actualizar la información existente sobre la producción citrícola de la cuenca del Río Paraná, utilizando las tecnologías disponibles de imágenes satelitales para relevar los datos de superficie, especie, estado productivo y edad de la producción citrícola en los departamentos de Bella Vista, Saladas, Concepción, Mburucuyá, San Roque y Lavalle. La tarea, que demandó un año de trabajo en gabinete y a campo, arrojó como resultado información precisa y de alto valor para el sector citrícola.
Del trabajo se desprende que el departamento de Bella Vista cuenta actualmente con 3760.83 hectáreas de cítricos, que están distribuidas de la siguiente manera: 66.48% limón, 19% naranja, 5.65% mandarina y 0.15% pomelo, quedando 7.84% la superficie sin identificar la especie correspondiente.
Comparando los datos antes presentados con los publicados por INTA en el año 2004, se puede observar que la zona de la cuenca del Río Paraná ha convertido su citricultura, antes predominantemente de especies dulces a agrias, creciendo en dicho periodo un 72.64% el cultivo de limón, y disminuyendo proporcionalmente la producción de naranja y mandarina.
En los últimos 14 años la superficie citrícola incrementó un 26,18%. Además es importante destacar que actualmente se encuentra un 76% de la superficie en estado productivo, y que más del 95% de las plantaciones menores a 10 años corresponde al cultivo de limón.
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Información para tomar decisiones
“La conversión responde a un tema de mercado. En el transcurso del tiempo fue resultando mejor negocio producir limones que naranjas. Para hacerlo, se requiere de condiciones – como el riego o la calidad del suelo – que Bella Vista tiene. Pero para que el cultivo pueda cuidarse y crecer hace falta información. Y el relevamiento que se llevó adelante aporta valores cuantitativos que no sabían y que serán muy útiles”, opinó Luis Mestres, Director de la Estación Experimental Agropecuaria del INTA en ese departamento al ser consultado por CdA.
“La información que se pudo recolectar ofrece un mapa actualizado con un sistema de localización geográfica. Esos datos serán muy útiles también en casos de emergencias climáticas o plagas. Con buena información, se pueden tomar decisiones mucho más rápido y acertadas”, destacó, en tanto subrayó la calidad del trabajo conjunto entre el INTA y el Ministerio de la Producción de Corrientes.
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Fruta para la industria y la esperanza del parque industrial
La producción argentina de limón alcanzó en 2017 las 675 mil toneladas, casi igual que en 2016. Y aunque aún no están cerrada las cifras de 2018, el sector solo muestra crecimiento.
A diferencia de otros cultivos, cerca del 80 por ciento del limón que se produce tiene un destino en la industria y no como producto fresco.
En la Argentina el 77% es para procesamiento industrial y el 18% exportación en fresco. El consumo interno ronda el 5%. Según datos del Ministerio de Agroindustria, Argentina es el primer procesador mundial de limón y principal exportador de jugo concentrado, pulpas, aceite esencial y cáscara deshidratada.
A nivel local, las oportunidades de crecimiento por el perfil que presenta el mercado del limón siguen siendo alentadoras. Sin embargo, presentan barreras que solo se podrán saltar con políticas estratégicas y el trabajo en conjunto con inversionistas privados en desarrollo industrial y la visión de los emprendedores agropecuarios que se dedican a la actividad.
“Hace unos 20 años el cultivo era de naranjas casi en un 100%. Pero fue cada vez menos rentable y la necesidad económica empujó a buscar alternativas”, detalló por su parte Gustavo Sand, presidente de la Asociación de Citricultores de Bella Vista, que nuclea a unos 300 productores.
“La del limón atrajo a muchos productores, por ser un cultivo dentro de la misma actividad. En la actualidad también se desarrollan la frutilla y los arándanos”, dijo. Mientras que la naranja “sale con mejor vista y calidad” en el sur correntino y en Entre Rinios, donde el frio ayuda a la dulzura de la fruta, en Bella Vista el limón fue ganando terreno, hasta representar casi el 70% de la superficie cultivada.
No obstante, la actividad tampoco es un camino sencillo. “En la Argentina, el 80% del mercado lo tiene Tucumán, seguido por Salta y Jujuy. Corrientes representa apenas un 5% de ese mercado”, explicó Sand.
Además, la estacionalidad de la fruta condiciona las ventas. El 80% de la cosecha sucede en invierno y se destina a la industria, mientras que solo el 20% se vuelca en el mercado interno.
El perfil de pequeños productores dificulta una entrada a la exportación y orienta las miradas hacia un crecimiento industrial en la región. “La tasa de crecimiento de la superficie de las plantaciones ronda el 20% por año. En algún momento necesitaremos pensar en plantas de empaque que cumplan con requisitos de exportación, para poder competir en otros mercados”, evaluó Sand.
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“Este año ya cubrimos la demanda de las fábricas de jugo que hay en la zona y quedó algo de excedente. La expectativa apunta a que esas industrias puedan crecer”, detalló el referente citrícola.
Así, esperan que los proyectos de Parque Industrial en el departamento le abran a las fábricas locales la oportunidad de crecer, y eso apalanque también las oportunidades para el cultivo.
“El desafío es conseguir colocar el limón por fuera de estas fábricas. La alternativa más cercana serán las industrias que se están generando en el sur de la provincia. Pero lo más atractivo sería si las fábricas de Bella Vista pudieran crecer”, opinó al final.