Vivió toda su vida del campo y este acontecimiento la puso
muy feliz. Admitió que siente que el trabajo de los productores de la zona no
es valorado lo suficiente.
Alicia Barbona del paraje Ñaembé, a 25 kilómetros
de Goya, cosechó una mandioca de 1 metro de largo. “Estoy muy orgullosa de
ser mujer campesina y vivir en el campo” aseguró.
Barbona sembró el tubérculo en noviembre del año
pasado y esta semana lo recolectó en compañía de su hijo mayor de edad y su
nieta de 4 años. “También sembramos zapallitos, tomates y producimos
tabaco”, comentó.
Sus 53 años de vida los pasó en Ñaembé, en la zona
rural de Goya, y se dedicó a trabajar la tierra desde niña. “Es una
herencia de mi papá, él nos dejó este pedacito de tierra”, explicó.
“Llevamos un laburo muy duro y nos pagan muy
poco”, afirmó y dijo estar muy dolida porque su producción no es tenida en
cuenta. “Vivimos del campo, en nuestra zona hay productos muy buenos de la
tierra que no son valorados”, contó.
Vive junto a su esposo y resaltó que está muy
feliz de ser mujer campesina y de que las personas conozcan a través de las
redes sociales todo lo que pueden hacer.
