Micaela Camino, investigadora del CONICET en el Centro de Ecología Aplicada del Litoral fue una de las ganadoras de los premios Whitley que se entregaron en Londres, en reconocimiento a su trabajo sobre el pecarí quimilero, una especie endémica del norte de Argentina. Este galardón es conocido como el “Oscar Verde” y distingue a proyectos de conservación orientados a países ricos en biodiversidad.
La propuesta premiada tiene el objetivo de aumentar las capacidades de las comunidades locales para conservar el quimilero y el Chaco argentino. El pecarí es una especie que está amenazada y que, de acuerdo a estimaciones de la investigadora, podría desaparecer en menos de 30 años.
“Es un honor haber sido seleccionada. Si bien el premio me lo dan a mí, hay un montón de gente trabajando para que esto ocurra, tanto desde el monte como desde distintas ciudades e instituciones”, señaló Micaela Camino.
“Estamos en una región que es muchas veces invisibilizada y que cuenta con una enorme riqueza biológica y cultural. Por eso, es importante que podamos hablar de ella y de todos los problemas de conservación que la están amenazando”, destacó. El proyecto premiado surge de los trabajos de investigación que se realizaron durante más de 10 años y está enfocado en la conservación del quimilero y su hábitat, junto con las comunidades locales.