Invertir en Corrientes: ¿En qué consiste la oportunidad?

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Construir puertos, vías férreas, modernizar con tecnología y potenciar la industrialización son objetivos claros que el Gobierno define bajo la premisa general de “desarrollo”. Apunta a conseguir que se radiquen inversiones que podrían elevar el producto bruto geográfico en 35% y generar unos 40.000 puestos de trabajo por año. ¿En qué consiste la oportunidad?

Por Dora Alcaje 

Corrientes es una de las provincias menos industrializadas de la Argentina. De hecho, casi todo el interior comparte esa fotografía. Porque en el país, el 70 por ciento de las empresas se localizan en cuatro jurisdicciones: Capital Federal, Buenos Aires, Córdoba y Santa Fe.
Las desigualdades territoriales son abrumadoras. Mientras que en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires existen 42 empresas radicadas cada mil habitantes, en el norte del país solo hay 7. En otras regiones como Cuyo o Patagonia, el promedio ronda las 15.
De manera progresiva, con la instalación de parques industriales, fueron llegando nuevas empresas a la provincia. La apuesta ahora se orienta a crecer en ese sentido a partir de nuestras fortalezas. Y también a través infraestructura que aparece más cercana en el horizonte.
Con más de 550.000 hectáreas de bosques implantados, Corrientes concentra la mayor masa forestal del país y tiene disponibles más de 10 millones de toneladas de madera anuales para la industria. Con manifiestos intereses de capitales chinos por invertir en la región, se impulsan encuentros que podrán escalecer la demanda y las oportunidades concretas para la actividad. Los dos principales serán un seminario de exportación forestal (ver página 5)  este viernes, y en pocos días más, una misión comercial que encara el gobernador Gustavo Valdés al país oriental. 

De lo privado a lo público

Desde 2015, con un entusiasmo renovado quizás por el cambio de gobierno en la administración nacional, un conglomerado de empresas del sector forestal elevaron a la provincia un diagnóstico que –si bien no era algo nuevo– tomó impulso hasta consolidarse en acciones. Mientras que una de las primeras acciones del gobierno de Mauricio Macri consistió en conformar mesas sectoriales con el agro y dio el puntapié inicial a una Mesa Forestal Nacional –de la cual Corrientes siempre participó, cada vez con mayor protagonismo–, en el ámbito local resurgieron proyectos que hasta entonces no terminaban de despegar. La construcción de puertos con perfil exportador, la necesidad de modificar legislaciones para impulsar la radicación de industrias y bajar costos de logística fueron algunos de esos objetivos.

Algunos indicadores

Según esa visión (compendiada en un documento de AFOA de 2015), en la provincia de Corrientes se encuentra una capacidad disponible de más de 10 millones de toneladas de madera anuales para la industria, y eso la convierte en la provincia con mayor capacidad para recibir inversiones industriales, ya que concentra cerca del 40% del patrimonio forestal nacional. La puesta en valor del patrimonio forestal podría permitir a Corrientes aumentar el PBG (producto bruto geográfico) en 35%. Además, con la industria de papel kraft se podrían producir 800.000 toneladas de papel marrón para embalaje, insumo fundamental para la industria en todas partes del mundo. Y también se podrían producir 1,8 millones de toneladas de madera sólida, con la cual fabricar 600.000 m3 de tableros al año. Eso sin contar con una capacidad para producir 94 MW por año, solo en Corrientes, y generar nuevo empleo directo industrial para 40.000 personas.

Entusiasmo empresarial

“Hasta ahora, los aserraderos que estaban preparados son los que han podido apuntar a la exportación. Con el seminario organizado en Corrientes, vamos a poder conocer de primera mano a qué se orienta la demanda. Y luego podremos pensar de manera estratégica cómo potenciar oportunidades en conjunto entre las empresas más pequeñas”, evaluó Fernando Digiorgi, referente del Consorcio Forestal Norte de la provincia. “Se espera que otros aserraderos más chicos puedan volver a exportar. El principal desafío es la logística y poder cumplir con volúmenes, que podría conseguirse en conjunto”, apuntó. 
“Los chinos estaban buscando este tipo de oportunidades que ofrece Corrientes; los ojos del mundo están puestos en nosotros. El tema son las garantías: ofrecer estabilidad fiscal y judicial, porque son muchos los millones que tendrían que invertir”, opinó. “Contar con la legislación que incentiva la radicación de pasteras, los permisos para la circulación de bitrenes,  la actualización de la Ley de Bosques y los proyectos de obras de puertos sobre el Paraná llegaron para potenciar esas fortalezas”, analizó el referente.

Trampolín

Quizá, esta misión comercial al país oriental, una de las principales potencias mundiales, sea el escalón que la provincia buscaba para su despegue. No obstante, sea ese u otros los mercados a los que Corrientes aspire a alcanzar, lo cierto es que también para el Gobierno el desafío es industrializar la provincia. 
“La forestoindustria es para nosotros como fueron para Jujuy los yacimientos de litio, el petróleo en Vaca Muerta, la soja en la pampa húmeda o la tecnificación de productos agroalimentarios en el centro del país. Es el gran tractor económico, sin entrar en desmedro de otras actividades como ganadería, citricultura o arroz, que también estamos impulsando”, evaluó el ministro de Industria de la provincia, Raúl Schiavi, al ser consultado por este medio.
“Tenemos unos 250 establecimientos que ya transforman la madera, algunos con mucho valor agregado (como Zeni en Esquina, que exporta la totalidad de su producción de molduras a América y Europa) o Las Marías. Pero la gran mayoría tiene ahora el desafío de ponerse a la altura para aprovechar la oportunidad de exportar, que se potencia con la conveniencia del tipo de cambio y la demanda creciente de estos productos”, apuntó.

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